Rocablanca, o cómo ir a lo seguro

La consumición acompañada de tapa (sin tener que pagar una pasta) ya es un clásico de Madrid y son muchos los bares en los que por un precio muy atractivo bebes y comes.

Sin embargo, son menos los establecimientos que te dan a elegir la comida que te ponen con la caña o el refresco. Y es que, ¿a quién no le han puesto alguna vez unos champiñones que no le gustan con la cerveza?

Eso jamás ocurrirá en Rocablanca, un bar en el que por menos de dos euros puedes elegir la tapa que acompaña tu consumición. Tortilla de patatas, bravas huevos con bacon, hamburguesita, perrito caliente, croquetas o incluso salmorejo son algunas de las tapas que los amables camareros te ofrecen, entre otras muchas, dependiendo del día.

En total, suelen ser hasta cinco las opciones que tienes como cliente, además de poder contar con otras ofertas clásicas, como por ejemplo la jarra de sangría acompañada de ración a siete euros.

Hay también hamburguesas y sándwiches en torno a los dos euros y ensaladas por tres, siendo las raciones bastante económicas.

Puedes ponerte tanto en barra como en la mesa, y no suele haber problemas para ello, pero si eliges esta última posibilidad tendrás que levantarte tú mismo cada vez que quieras pedir una cerveza.

Cafetería Rocablanca
Calle de Fuencarral, 71, Madrid (ver en Google Maps)